»Words enable us to think. Story enables us to link.»
Si buscas «Storytelling» en Internet descubrirás decenas de artículos y posts que comparten las reflexiones de Christian Salmon, o que le critican… los hay que lo enfocan como una estrategia para crear nuevas actitudes y necesidades en el consumidor, y quienes lo viven desde la emoción. Leerás sobre moralejas, sobre su uso en publicidad y también en la enseñanza.
Toda una mina de datos, ideas y análisis en la que es fácil perderse. En NEURADS hoy queremos trazar un retrato con las características que, en nuestra opinión, resultan claves para entender y hacer un buen Storytelling en forma de vídeo dentro del mundo de la publicidad:
1. Una traducción razonablemente ajustada de Storytelling sería «contar historias». Pero a menudo nos parece que cualquier definición se queda corta.
Silvia Silvera, profesora de creatividad publicitaria, habla así al respecto en la revista ComeIn: «Los publicitarios somos grandes masticadores de palabras de nuestro argot profesional. Estiramos anglicismos como si fueran chicles, hacemos burbujas con neologismos (…) Últimamente le hemos encontrado el gusto al palabro storytelling.(…) Efectivamente, no es específico de un campo concreto ni es nada nuevo. (…) La publicidad, desde siempre, es narración. Y las marcas son relatos.»
2. Aunque, como apunta Silvera, la publicidad siempre ha narrado, antes el protagonista de la historia era la marca: en los Storytelling actuales lo son las personas (o personajes animados), y si quieres que el prota sea tu producto… humanízalo.
Un punto importante en nuestra reciente estrategia Branded Content para la consultora inmobiliaria JLL, con dos proyectos, uno documental y otro de ficción:
– #EseLugarEspecial, un proyecto que reflexiona sobre las conexiones emocionales entre las personas y los espacios en los que habitan o transitan. Una muestra de que hasta los sectores más tradicionales también tienen historias que contar.
– #EncuentraTuLugar, la primera webserie del sector inmobiliario. Una comedia en el entorno laboral en la que, de nuevo, el espacio juega un papel protagonista.
Apuesto a que tres copazos de Johnnie Walker no te acercan tanto a la marca como este genial corto:
3. Al humanizar las marcas logramos una mayor identificación del público con éstas.
Campofrío se sitúa tras algunas de las figuras públicas más queridas de España y nos invita a sentirnos parte de ese colectivo:
4. Fruto de esa identificación llega la empatía, abriendo las puertas al gigantesco mundo de las emociones. (Si todavía no has oído hablar del papel de las emociones en el marketing, puedes echarle un vistazo a nuestra crónica de Branducers III).
El Storytelling que plantea TOMS, empresa creada por Blake Mycoskie, tiene un enfoque social que desde luego emociona: por cada par de alpargatas vendidas, este norteamericano enamorado de Argentina regala otro a niñas y niños en situaciones desfavorecidas de distintos países en desarrollo. Así explicó su proyecto a la gran Ellen DeGeneres:
5. Lo más importante de cualquier historia, más allá de cómo se cuente, es EL CONTENIDO. La fórmula del Branded Content permite desarrollar storytellings en los que contar historias desde la marca que trasciendan, con creces, la descripción de su producto.
Una buena historia puede convertirse en un documental de Branded Content como ‘Viaje al interior de la cultura’, producido por MultiPlatform Content con Telefónica para La 2 de TVE:
6. Existen temas clave con los que conectar con el público. La vida y la muerte, el amor y el desamor, el odio, la amistad, el bien y el mal, la esperanza o el engaño… Hacer de alguno de los ‘temas universales’ la trama de tu historia es una buena idea para facilitar que tu mensaje se expanda.
Amorrrr… qué enganchados estamos al amor. En Nike lo saben, y por eso nos encanta esta historia:
El humor, que suena parecido al Amor y cuando la cosa funciona ambos comparten muchos momentos, también es un estupendo motor de emociones:
7. Cada vez es más habitual apostar por la interacción con el público, y por ofrecerle experiencias reales. Si éstas son positivas, tu marca permanecerá en su recuerdo asociada a un buen momento. Aquí tienes un ejemplo de acción de Storytelling dentro de la campaña de marketing de la peli ‘La vida de Pi’:
8. Como ya habrás comprobado en los vídeos de ejemplo, existen muchas formas distintas de plantear un Storytelling. André Mazzaro sugiere ocho tipos en función del discurso y experiencia ofrecidos.
9. Mazzaro también habla de las moralejas: la grandes historias que han sobrevivido en el tiempo suelen entrañar enseñanzas morales (ahí tenemos al Quijote para recordarnos que la felicidad es alcanzable persiguiendo un ideal). No todos los Storytelling tienen, sin embargo, por qué contener moraleja… en función de tu marca, quizás ni siquiera necesiten ser »morales».
10. Nada de lo anterior tendrá sentido, ni será efectivo, si no hay una idea clara del mensaje que se quiere transmitir y una estructura para hacerlo. Cada segundo hay nuevos contenidos en YouTube. La urgencia por tener visibilidad puede llevarnos a lanzar vídeos poco pensados o que se alejen de los valores de nuestra marca.
Por eso es fundamental tener claro cuál es tu adn de marca, a quiénes te diriges y qué historia les vas a contar: no porque sea interesante o útil para ti, sino sobre todo porque lo será para ellos. Porque estamos aquí para ser felices… o al menos intentarlo, ¿no?